El primer contacto que sucedió en mi vida con una maestra fue nueve meses antes de nacer. Mi mamá… Maestra Normal Nacional. El último contacto que tuve fue hace unos minutos, con un pequeñito dueño de mi alma. Mi sobrino Thiago del que aprendo y aprendo.
En el medio… es decir a lo largo de toda mi vida, gracias a Dios tuve contactos con muchos maestros y maestras. Los titulados durante toda la etapa escolar, universitaria, y muchos otros espacios de estudio formal. Ahora, como la vida me metió en el ámbito educativo, tengo contacto con maestros que son mis alumnos. Con alumnos que son mis maestros. Qué impresionante.
Pero también en el medio, tengo, tuve y apuesto que tendré grandes maestros. Todos todos te enseñan algo, o no? A veces me pregunto qué enseñaré yo, vaya a saber.
Allí están todos los parientes, colegas reconocidos, amigos, compañeros de trabajo, compañeros de estudio. Es más, como la vida que es tan loca va tejiendo y destejiendo situaciones, también tengo amigas que ahora son docentes, y docentes que son grandes amigos.
Ah! no quiero olvidarme que también se aprende de aquellos de los que no se quiere incorporar nada. De esos que uno no quiere imitar, también se aprende.
Es maravillosa la tarea del maestro. Si tuviera que comprar una manzana para darle a cada uno de los que me enseñó algo en estos años….. no tendría manera de conseguir tantas!!!
Así que a todos y a cada uno vaya una manzanita representativa en este mensaje, agradeciendo cada cosa que aprendí. Ustedes son los autores. Nosotros somos los autores de lo que enseñamos. De nosotros se aprende… mucho más de lo que creemos que enseñamos. Es GRANDIOSO!
Es grandioso y es difícil.
Para ser maestros, no podemos ser pesimistas, es verdad.
Feliz Día!!!!
